Para los seres humanos quejarnos es tan natural como respirar. Nos quejamos por el tráfico, por los precios que aumentan, por la política, porque alguien del equipo hizo algo que no era, nos quejamos o molestamos hasta por cómo se vistió alguien que iba caminando por la calle y ni siquiera conocemos.
Cuando hacemos esto no sólo estamos gastando y dedicando energía a ese momento, sino que estamos poniéndonos en un estado mental y físico que lo único que hace es restarnos. Sentimos malestar, nos enojamos, discutimos, nos preocupamos y esto también se traslada a nuestro cuerpo: angustia, miedo, cansancio, agotamiento.
Hoy Francisco Alcaide, autor de Aprendiendo de los Mejores, compartió en una historia lo siguiente y no puede estar más en sintonía con lo que venía pensando esta semana:
En la vida hay dos opciones: aceptar las condiciones existentes o aceptar la responsabilidad de cambiarlas.
La tercera opción, quejarnos y pasarla mal, ni siquiera deberíamos contemplarla ¿En qué te suma preocuparte por la nafta que sube o lo que hizo el último político de turno? ¿Y pasar horas hablando o discutiendo o pasándola mal sobre esos temas? ¿En qué te suma sólo sentir indignación por la situación y no hacer nada al respecto? Estas son preguntas reales, me gustaría que lo pienses y saques tus conclusiones.
Como dijo Epicteto:
“Solo hay un camino a la felicidad y es dejar de preocuparse por las cosas que están más allá del poder de nuestra voluntad”
O sea de las cosas que no podemos controlar.
Si vas a dedicar tu tiempo y tu energía a algo, hacelo con las cuestiones que están bajo tu control, en las que podés influir y cambiar. Y te dejo un ejercicio práctico para que apliques lo que te vengo contando, la próxima que estés preocupándote o sintiéndote abrumado/a por algo:
Preguntate ¿Puedo hacer algo al respecto de esta situación?
- Si la respuesta es NO: no te preocupes más y deja de darle lugar en tu vida.
- Si la respuesta es SÍ: preguntate ¿Quiero hacer algo al respecto?
- Si la respuesta es NO: no gastes más energía en esto.
- Si la respuesta es SÍ: preguntate ¿He hecho todo lo que podía hacer al respecto de esta situación?
- Si la respuesta es SÍ: no gastes más energía en esto.
- Si la respuesta es NO: tomá el control, pasá a la acción y hacé lo que tengas que hacer. Cuando termines, no gastes más energía en esto.
Sumado a estos ejercicios para situaciones particulares, remover la queja de nuestro día a día es un hábito muy poderoso que nos lleva a tomar control de nuestras vidas, dejar de ser víctimas de las circunstancias y decidir qué queremos que tenga relevancia en nuestro día a día. Decidilo.
Meditaciones de Marco Aurelio. Un libro muy llevadero y súper accesible. Contiene los pensamientos privados del hombre más poderoso del mundo dándose consejos a sí mismo sobre cómo cumplir con las responsabilidades y obligaciones que demandaban sus puestos.
Marco Aurelio, formado en filosofía estoica, dedicaba momentos casi todas las noches a practicar una serie de ejercicios espirituales y recordatorios diseñados para hacerlo humilde, paciente, empático, generoso y fuerte frente a lo que sea que esté enfrentando.
Es uno de esos libros que dejo sobre algún mueble accesible de mi casa y agarro al pasar, abro en cualquier lugar y siempre salgo con una frase o una línea que me suma a la vida. Es la filosofía práctica para aplicar a la vida.
Claire Diaz-Ortiz, inversora en la startup Jefa, se comprometió a ayudar durante 2 meses a la fundadora de Jefas para que se tome un retiro por maternidad para tener a su bebé. Los embarazos siempre fueron tratados como una crisis de PR para las empresas, este hilo muestra formas en las que se puede hacer algo al respecto para ir cerrando esta situación. Si querés saber más sobre el impacto de preguntarte qué podes hacer vos para cambiar estas situaciones (y las que sea que tengas al frente) lee este hilo.
“I Want It” - Two Feet. Toda su música es excelente.
"La mejor venganza es ser diferente a quien causó el daño"
- Marco Aurelio
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