Buen domingo para todos!
Antes de empezar con el cortitio de hoy, un recordatorio:
Si sos de quienes pasaron a la acción en preventa y adquiriste mi libro o alguno de los packs antes hasta el 2 de abril inclusive, a partir de este martes 15 de abril a las 15:00 GMT-3 vas a poder canjear tus bonos.
¿Cómo?
Vas a ingresar a shop.soficontreras.com/libro y ese día vas a encontrar una sección para dejar tu nombre, mail y número de orden de compra de la plataforma en la que hayas comprado (aplica para ebook también). Vas a recibir un mail con los recursos habilitados.
No te preocupes, vamos a comunicar todo por redes. Ya falta poco!
Y ahora si, vamos cortito y al pie.
Hay días en los que terminamos agotados, mirando una lista de tareas que sigue casi igual que como arrancó.
Y eso nos hace pensar que estamos haciendo algo mal. Que no somos suficientes. Que no estamos rindiendo.
Pero el problema no sos vos. Tampoco lo son las 24 horas que tiene el día.
El problema es que sobredimensionamos lo que creemos que podemos hacer.
Subestimamos el tiempo que realmente requieren las cosas.
Ejemplo básico:
Decís “voy al gimnasio, es una hora y media como mucho”.
Pero si lo pensás bien, entre cambiarte, el trayecto de ida, el entrenamiento, la vuelta y la ducha… te fuiste tres horas.
¿Y qué pasa? Que no lo considerás, y te frustrás cuando no llegás a lo demás.
¿Cómo lo resolvemos?
Esto no es solo para organizarte mejor, sino para liberarte de esa sensación de estar fallando.
Y cuando terminás el día, te invito a que revises:
¿Qué salió bien? ¿Qué no tanto? ¿Dónde subestimaste el tiempo?
El tiempo no se puede tener. Pero sí se puede gestionar.
Y si querés profundizar en esto, escribí un libro que se llama “Pasa a la Acción” y lo encontrás en librerías o haciendo click acá.
Desde que somos chicos nos enseñan que hay que “llegar”.
A la nota. Al título. Al trabajo. A los 10K por mes. A la casa propia. A algo.
Y con eso se instala una idea silenciosa pero poderosa: que la felicidad está en el logro, en el check final, en la meta cumplida.
Pero... ¿y entre meta y meta? ¿Qué vida estás viviendo?
Porque si te pones a pensar, la vida no está hecha de momentos extraordinarios. Mas bien se compone de días comunes. De un martes cualquiera.
Y no, no te hablo de vivir en un estado constante de felicidad absoluta.
Eso no existe.
Pero sí de algo mucho más simple y más real: encontrar en cada día un momento que te haga bien.
¿Cómo se ve un martes cualquiera de tu vida haciendo algo para vos?
No necesitas más tiempo en tu vida. Necesitás más vida en tu tiempo.
Y por eso te dejo un desafío para esta semana: Regalate todos los días un rato para vos, haciendo eso que te hace bien. Hacelo todos los días y el viernes analizá como fue la semana.
Estoy segura que va a tener un sentido distinto ;)
Es común creer que el crecimiento de un negocio se da de forma exponencial en una única dirección, sin contemplar las subidas y bajadas por las que tendrá que pasar para potenciar tus resultados.
Pero cada nuevo nivel trae desafíos que incomodan y nos frenan. Y dejame decirte que esa fricción no es un error, es parte del proceso.
Muchas veces hay que retroceder, detenerse y evaluar para luego avanzar con más fuerza.
Esta semana en mi Podcast:
“Mientras esperamos la vida, esta pasa.”
Séneca.
El sistema de hábitos decisiones y acciones para crear la vida que queres. Adquirí tu ejemplar acá.
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